DATA SCIENCE FOR GOOD: LA TECNOLOGÍA SE PONE AL SERVICIO DEL BIEN SOCIAL

Es un concepto que nació hace 10 años con el fin de utilizar la tecnología para resolver problemas globales.

¿Qué pasa cuando la tecnología se pone al servicio de un bien social para generar un verdadero impacto en la realidad? Lo que surge es la Data Science for good, un movimiento que viene creciendo desde 2009 a partir de una alianza entre la ONU y el MIT para trabajar en conjunto sobre los 17 objetivos de desarrollo sostenible. En el mundo la sinergia entre las empresas de Data Science y las organizaciones sociales está muy difundida, con el fin de solucionar problemáticas de salud, medio ambiente, educación y producción, entre muchas otras. 

Aunque en Argentina estas iniciativas todavía son incipientes, existen algunos casos como el de RockingData, una empresa especializada en Big Data, Inteligencia Artificial y Data Science, que recientemente prestó sus servicios a la ONG Pata Pila para potenciar el trabajo que viene haciendo en el área de desnutrición infantil. Fredi Vivas, co-fundador de RockingData, cuenta que su principal motivación siempre fue encontrarle un propósito a la tecnología.  

Empezaron a trabajar juntos en febrero de 2019 con el objetivo de conocer mejor los perfiles de los donantes y así poder delimitar una estrategia comunicacional más inteligente, basada en datos, y así alcanzar nuevos públicos. “Lo que hicimos fue ayudarla a buscar en el comportamiento de sus donantes ciertos insights que le permitiera mejorar el vínculo con ellos”, explica Vivas. Uno de los insights que encontraron es que había un grupo de personas que no quería recibir más información sobre el destino de sus fondos. Tampoco quería participar de eventos anuales o que lo llamase por teléfono. Por otro lado, descubrieron que el perfil mayoritario es el llamado “oficinista”, una persona con trabajo estable que le gusta que le reconozcan su aporte y ver el valor del mismo. 

Estos proyectos son significativos porque ayudan a las organizaciones de cambio social a aprovechar al máximo la información que reciben por medio de la digitalización de sus actividades. Aunque las empresas ya tienen instaladas estas técnicas, la mayoría de las ONG no cuentan con el equipo o los recursos para desarrollarlas. “Nosotros recibimos mucha información todo el tiempo pero no teníamos las herramientas para procesar y hacer uso de esos datos. A partir del trabajo en conjunto con RockingData hoy podemos entender con mayor claridad quiénes son nuestros donantes”, dice Sofía Castro Videla, a cargo de Comunicación Digital e Innovación en Pata Pila.  

Si bien en esta primera instancia se aplicó el análisis de datos para mejorar un proceso interno, como es el fundraising, a futuro a Castro Videla le gustaría utilizarlo para obtener información nutricional más precisa de los niños y las comunidades que asisten.  

Vivas pronostica que en el mediano plazo cada vez más empresas tendrán interés en apoyar iniciativas de Data Science for Good. “Las áreas de RSE (Responsabilidad Social Empresaria) además de pintar una escuela o construir una plaza, van a querer financiar proyectos que tengan aún más impacto, como por ejemplo, el diseño de un sistema que permita tener un conocimiento más certero sobre el rendimiento de los alumnos en las escuelas”, opina el co-fundador de RockingData. Castro Videla también considera que la tecnología tiene mucho por aportar en lo que hace a la transformación de procesos y la elaboración de estadísticas en organismos tanto gubernamentales como sociales. “Con algunas pocas herramientas el cambio puede ser enorme”, resume.