Diego Schwartzman jugó un buen partido pero terminó cayendo ante un intratable Rafael Nadal en sets corridos: fue 6-4, 7-5 y 6-2 a favor del español. El argentino tuvo segmentos de gran tenis y por momentos hizo transpirar al número 2 del mundo más de la cuenta, pero la fortaleza física y mental del mallorquín terminaron nivelando la balanza a su favor. De hecho, Nadal le ganó al "Peque" las ocho veces que se enfrentaron entre sí. El rival de "Rafa" en las semifinales del Us Open será el sorprendente italiano Matteo Berrettini (24°), que derrotó en un verdadero partidazo a cinco sets al francés Gael Monfils (13°). En la otra semifinal, el búlgaro Grigor Dimitrov medirá su talento ante el bombardero ruso Daniil Medvedev (5°).
Rafael Nadal salió a jugar con mucha convicción desde el inicio, sólido con su saque y muy potente con su izquierda, como es habitual. Aprovechando que Diego Schwartzman, por el contrario, entró nervioso y dubitativo, el mallorquín se colocó rápidamente 4-0 arriba. Pero el "Peque" de a poco empezó a agarrar confianza y a demostrar que no llegó de casualidad a los cuartos de final del Us Open. Y lo hizo no solo con su drive de fondo de cancha, sino también mediante tiros con efecto y hasta yendo a la red, volviendo loco al mallorquín. Esta gran reacción de Diego lo hizo llegar al 4-4 y con una chance inmejorable para quebrarle el saque a Nadal. Pero Rafa se recuperó y el "Peque" erró en los puntos decisivos, por lo que el español le volvió a quebrar y se llevó la manga finalmente por 6-4.
El segundo set fue prácticamente un calco del primero. Nadal arrancó sólidamente y borró a Schwartzman de la cancha, mediante tiros angulares, saques determinantes y voleas poderosas, logrando una ventaja de 5 a 1. Pero Rafa fue mermando en su juego, una vez más. Y el "Peque" volvió a tomar confianza y mejoró notablemente: hasta se dio el lujo de ganar el punto del partido mediante una doble volea en la red de un Nadal que no lo pudo definir y Diego corrió, luchó y obtuvo el punto, ganándose la ovación de todo el estadio Arthur Ashe. El argentino se colocó 5 a 5 y con una nueva chance de quiebre, pero la desaprovechó y el español volvió a renacer con solvencia una vez más, llevándose el parcial por un parejo 7-5 que sentenció prácticamente el partido.
El tercer y último set arrancó con algunas dudas para el español, que tuvo que pedir asistencia médica por un calambre en su brazo derecho. Pero cuando los masajes y las cremas hicieron efecto, apareció el Rafael Nadal que todos conocemos y el "Peque" lució muy desanimado, jugando el parcial con poca intensidad y beneficiando el lucimiento del español, que finalmente se llevó la manga por 6-2 y un partido que por momentos se le complicó más de la cuenta.
A pesar de la derrota, Diego Schwartzman y su equipo, liderado por su entrenador Juan Ignacio Chela, tienen que estar más que orgullosos y satisfechos del torneo que ha hecho el "Peque". No es fácil llegar a los cuartos de final de un Gran Slam, ganándole a un Top-Ten como Alex Zverev y jugándole por momentos de igual a igual al número 2 del mundo. Así y todo, no le alcanzó para doblegar la potencia de Nadal (de hecho, perdió los 8 enfrentamientos ante el español), que lo superó en los momentos claves a través de su fortaleza física y mental. Es quizas en los pequeños detalles donde van a tener que trabajar, en la parte psicológica, porque en el aspecto físico y técnico Diego ha mejorado de forma notable, demostrando estar a la altura de los mejores jugadores del mundo. De hecho, Schwartzman pasará del puesto 21 al 15, ubicándose como el argentino mejor rankeado. Y si sigue en este nivel, es probable que muy pronto llegue a puestos de Top 10.
Nadal, por su parte, festejó el triunfo de forma alocada y se perfila como el máximo candidato al título. En las semifinales, se enfrentará al sorprendente italiano Matteo Berrettini (24°), que jugó el partido de su vida al derrotar al francés Gael Monfils (13°) en una maratónica batalla de más de cuatro horas. El marcador final fue: 3-6, 6-3, 6-2, 3-6 y 7-6(5). El italiano logró 53 tiros ganadores y sus principales armas son su potente drive y un saque demoledor. Párrafo aparte para Monfils, que a pesar de estar mal físicamente (realizó 17 dobles faltas) dejó todo en la cancha, corrió y luchó hasta el final pero no pudo ante el bombardero italiano, que cerró el partido en el tie-break aprovechando su quinto match point. En la otra semifinal, se enfrentarán dos tenistas con estilos dispares: por un lado, la clase y el talento del búlgaro Grigor Dimitrov (78°), que viene de superar nada menos que a Roger Federer. En la otra vereda, un potente (y gigante) sacador ruso que viene dando que hablar por ser el jugador que más triunfos ha cosechado este año (44) y que viene de ganar el Masters 1000 de Cincinnati: Daniil Medvedev (5°).
|
|
|
Comentarios (0)
Comentarios de Facebook (0)