CHRISTIAN VARGAS: UN ODONTÓLOGO SOLIDARIO

CHRISTIAN VARGAS: UN ODONTÓLOGO SOLIDARIO

El nombre de nuestro superhéroe de hoy es Christian Vargas, es Odontólogo, Implantólogo, Especialista en Cirugía Oral y Director Clínico  de Les 1001 dents una Clínica  Social de la ONG Acción Planetaria de Barcelona que atiende a personas sin recursos derivadas por los servicios sociales y otras entidades. Pero su trabajo no termina allí ya que además  es Presidente de la ONG y Jefe de Expedición en las interveciones internacionales, razón por la cual viaja por diferentes lugares del mundo contribuyendo a que muchas personas puedan mejorar su salud bucodental y puedan tener una mejor calidad de vida.

En una nota exclusiva con Diario Prensa del Interior Christian nos contó acerca de su trabajo. A continuación su historia…

“Mi nombre completo es Christian Vargas, acabé la carrera en el 2001 y en el 2004 ya empezamos a hacer cooperación internacional. Los primeros viajes a los que fui, fui llevando un camión, luego llevé dos, tres, cuatro hasta que al final llevé una caravana de ocho camiones todos equipados odontológicamente y medicamente para hacer atención in situ.”

¿Cómo fueron las primeras experiencias?

Los primeros cinco o seis años eran sólo de atención. Me especialicé mucho en Mauritania, más en la parte del desierto y Senegal, más en la costa. Estuve muchos años trabajando allá, dando formación, capacitando a personas locales para que puedan ser dentistas porque considero que lo más importante es dar autonomía, que no dependan de un asistencialismo y sólo haya atención dental si es que yo me movilizo hacia allá.

¿Cuánta gente viaja?

Realmente mucha gente, los viajes son muy distintos. Los primeros años eran grupos hasta de 30 personas. Eran viajes muy largos que duraban entre 2 o 3 meses con estancias mínimas de un mes para cada voluntariado. Yo mismo me quedaba tres meses e iba recibiendo gente. Ahora mismo ya no hacemos viajes tan largos porque entendemos que los voluntarios tienen una vida y no es fácil conseguir personas que quieran dedicarle 1 mes o 2 meses de su tiempo libre. La gente tiene obligaciones y trabaja. Por el contrario, antes hacíamos un viaje anual  y ahora alrededor de 6 viajes anuales.

¿A qué países fueron?

La lista de países a los que vamos y hemos ido como te dije sería Senegal, Mauritania, Sierra Leona y Uganda, serían del continente africano. Luego en Europa hemos trabajado en Grecia con el tema de los refugiados, en Serbia y en Hungría. También en el norte de la India y pasamos a América: tenemos un comedor de niños en Perú. Hemos trabajado en Guatemala también y en marzo o abril  nuestra intención es hacer un comedor de niños en Colombia, en el norte, en la Guajira, creo que es una zona muy necesitada.

¿Qué es lo que te lleva hacer esto?

¿Qué es lo que me lleva a hacerlo? Ahora ya no sabría hacer otra cosa que no fuera hacerlo.

¿Por qué eligiste darle un vuelco a tu profesión y dedicarte a ayudar activamente?

Bueno yo  siempre me he dedicado… no sé si a ayudar a los demás pero estoy muy formado en la meditación, muy consciente de la vida en la Tierra y me he dado cuenta que si tenía alguna habilidad que la debería ofrecer a los demás, así que no sé cómo es, pero es un espiritu que nace y elige. No tengo una educación, una base puramente religiosa y no creo que porque haga cosas buenas me voy a ganar el paraíso, lo hago porque creo que se está mejor viviendo aquí compartiendo entre todos y, sin dudas, yo estoy en un punto en que recibo más de lo que doy. Doy y ya me lo estoy pasando muy bien. Tengo la fortuna de poder viajar a países distintos cada mes y medio, dos meses, y recibo las experiencias de distintas culturas: me gusta ver cómo vive la gente y aprovechar y si puedo aportar a sus vidas fantástico.

Otra de la cosas que me gusta mucho es llevarme voluntarios que nunca han viajado. El hecho de que haya personas que nunca han salido de su casa, que nunca han tenido otra experiencia que su círculo cerrado de amistades, pues me gusta sacarlos de ese circulito de confort y meterlos en una realidad totalmente distinta para que vean que el mundo va mucho más allá de las paredes de su casa.

¿Hay algo que pidan a sus pacientes a cambio del tratamiento?  

No nos gusta regalar tratamientos, allá a donde vamos esperamos que la gente siempre haga algo a cambio de la ayuda que recibe. Fomentamos bancos de tiempo, ayuda  corporativa, digamos que cualquier paciente que es atendido por nosotros tiene que demostrar que esa persona ayuda a un colectivo de personas o está ayudando a alguien más o es proactiva. Evidentemente esto lo tomo en paréntesis cuando estoy haciendo una campaña como la que he estado en Senegal, que voy un día a cada pueblo y se hace difícil tener un seguimiento de control, pero sí, por ejemplo, hago que la gente que se quiere atender recoja la basura que tiene alrededor. El tema de la basura para mí es el demonio que tenemos todos, la pobre tierra que está hecha mierda (sic) por tanta basura. El que quiere que le arregle un dientecito por lo menos tiene que hacer un trabajo de limpieza  de basura.

¿Cuántos fueron en el último viaje y a cuántas personas atendieron?

Viajo siempre con mucha gente, a veces los grupos son de 15, 20, 30 personas, nunca viajo con un mínimo grupo de 6 u 8 porque sino no puedo atender. En el último viaje que hemos estado en Senegal, ha sido un viaje de 15 días fuera de casa, atendiendo alrededor de 8 días porque se pierden muchos días en viajes, llegadas, recibimientos y demás. En esos días atendimos a 1070 personas y tratamientos hemos llegado a hacer 2800.

¿Qué cosas te han impactado más?

¿Cosas que me han impactado más? He tenido la mala suerte de ver gente fallecer por infecciones bucales. Alguien que trabaja en Barcelona, Europa, el mundo nunca se lo hubiera pensado, creo que ninguno de mis compañeros puede creer que por un dolor de muelas alguien puede perder la vida. Esto fue lo que me ha impresionado más y es lo que me motiva porque a veces me dicen bueno vas a sacar un diente tampoco es tan importante ¿no?, tienes idea que no salvas el mundo ¿no? Pero sé que es verdad porque hay países donde hay personas que no tienen acceso a un antibiótico, entonces una infección tan cerca del cerebro es muy peligrosa, peligrosa hasta de muerte. Esto me llamó mucho la atención junto con los primeros años cuando fui a un pueblecito de Magama, en Mauritania en el que no se manejaba el dinero, yo llegué en 2005 aproximadamente a visitar pueblos donde la transacción era trueque por más que en Mauritania sí hay moneda, pero se manejaba más en la capital. En el desierto dentro de los poblados que hay en el interior no había, esto me sorprendió mucho, me gustó mucho la sensacion de que no valiera el dinero, de que haya otras formas de intercambiar las cosas.

¿Cómo es la selección de voluntarios?

Bueno depende del proyecto, del viaje el perfil es uno u otro. Si es mucha asistencia dental vamos a preferir personas profesionales pero, por ejemplo, en el comedor de niños profesores, educadores… la verdad que en ese aspecto no tenemos mucho filtro, siempre valoramos mucho la ayuda de cualquier persona con ganas de colaborar, es fantástico para realizar cualquier proyecto. Según el perfil los ubicamos en una tarea u otra pero no renunciamos a la ayuda de cualquier persona, todo el mundo es bienvenido.

Por último…¿En qué consiste tu trabajo en España?

Desde 2012, monté una clínica solidaria en Barcelona, que sería casi el 80 por ciento del tiempo que dedico acá y que ha sido fruto de toda la experiencia en estos viajes fuera. Uno se da cuenta que en casa hay muchas necesidades, trabajo con muchas asociaciones y fundaciones que me derivan personas en una situación dificil y hago todo lo posible porque tengan una salud bucodental aceptable o muy buena.

La odontología o el trabajo solidario cuando hay un seguimiento son mucho más enriquecedores, se puede llegar a la transformacion de aquello que estaba desarmónico. Si una persona llega a nosotros porque tiene una muy mala salud bucal porque tiene malos hábitos y después de estar con nosotros 6, 8 meses, un año… logramos que revierta esa situación de abandono, es mucho más gratificante que viajar a Uganda y sacarle 10 dientes a una persona que los tiene realmente mal…

Conocimos un pedacito de una historia que tiene como cabeza al doctor Christian y que incluye a miles de voluntarios (superhéroes y superheroínas) que con su granito de arena hacen de este mundo un lugar mejor. Si les interesa conocer un poco más pueden entrar a www.les1001dents.com o a www.accionplanetaria.org o seguirlos a través de instagram @les1001dents o @accionplanetaria. 

Hasta la próxima historia...