IMPROVISACIÓN Y BARBARIE

La Selección Argentina de Scaloni debutó con una derrota ante Colombia por 2 a 0 en la Copa América de Brasil. Se jugó muy mal y ni Messi se pudo destacar en un equipo mediocre y sin variantes, que dejó sensaciones muy preocupantes de cara al futuro. 

Es sabido desde tiempos inmemoriales que la improvisación no es la mejor aliada del éxito. Y mucho menos, la desorganización. Y esa es la impronta que dejó ayer la Selección Argentina dirigida por Lionel Scaloni. En la previa, era una incógnita como podía funcionar un mediocampo con un doble cinco bien marcado (Guido Rodriguez y Leandro Paredes) más Lo Celso y Di María por las bandas. ¿Hubo algún ensayo previo con este mediocampo? La respuesta es negativa. Primer indicio de improvisación. Arriba, Messi y Agúero debían luchar contra los grandotes defensores cafeteros. Otra dupla que ilusionaba a priori era la sociedad Messi - Lo Celso. 

¿Qué fue lo que pasó finalmente? Se vió a un equipo muy previsible, sin reveldía ni creatividad, que tocó la pelota de un lado a otro sin poder ser punzantes en ningún momento. Otro dato llamativo es que, debido a este proceso de "renovación", de los 11 jugadores argentinos que arrancaron el juego, solo 4 tenían experiencia en Copa América (Otamendi, Di María, Messi y Agüero). Colombia se replegó bien y hasta inquietó con alguna contra el arco de Armani, quien casi comete un error fatídico ante la incesante presión de Falcao y Muriel. 

Di María fue lo más flojo de la albiceleste durante ese primer tiempo, llegando a tocar tan solo 10 balones. Lo Celso gravitó muy poco también, y esa sociedad con Messi lamentablemente nunca prosperó. 

El segundo tiempo arrancó con una variante un tanto sorpresiva para muchos: Rodrigo de Paul por Ángel Di María. Mi pregunta es, si pones a un jugador desde el arranque porque confias en él y es tu carta de ataque por izquierda, ¿Tiene lógica que lo saques en el entretiempo? En mi opinión Di María ya no puede jugar mas en la Selección. Pero al margen de esto, imaginen como quedará la psiquis de Angelito de cara a los próximos encuentros. A favor del entrenador, De Paul le dió un aire renovador al equipo, mostrando un gran entusiasmo ofensivo. Se asoció con Messi, y ahi sí Argentina pudo crecer en juego, llegando varias veces al arco rival. Primero fueron dos remates al arco de Leandro Paredes: uno se fue apenas desvíado, el otro lo tapó muy bien David Ospina. Luego, Agüero se la devolvió de taco a Messi, este encaró hacia el área y tiró un caño, pero Wilmar Barrios le cerró el paso. Ese fue el mejor momento argentino en el cotejo, siendo la última llegada un cabezazo a quemaropa de Otamendi que tapó muy bien Ospina y en el rebote Messi cabeceó apenas afuera. A continuación, Scaloni apostó por un cambio inexplicable a mi entender: Guido Pizarro por Guido Rodriguez. Ahora, mi siguiente pregunta es: ¿Están capacitados estos dos jugadores que actualmente "brillan" en México para jugar en la Selección? Sigamos improvisando nomás... 

Por consiguiente Argentina, de tanto ir al ataque, quedó descompensado en el fondo, y Colombia lo aprovecho haciéndose un festín. Primero, Roger Martínez recibió un preciso pase largo de James Rodriguez por la izquierda, bajó la pelota, la acomodó, gambeteó como quiso a Renzo Saravia y sacó un derechazo fulminante para el arco de Armani. Pizarro no pudo llegar al cruce. Ahora sí, a buscar el empate con todo, por eso Scaloni puso a Matías Suárez, sacando a... sí, al Kun Agüero. No digo que haya hecho un buen partido el delantero del City, pero...¿Lo sacas a Agüero, tu supuesto número 9, para poner a Suárez que en el River de Gallardo juega de media punta? ¿Mantenes el doble cinco teniendo que ir a buscar el partido? Y bueno, experimentemos total, ya estamos jugados... El juego siguió de la misma manera, con Argentina yendo a buscar sin ideas y Colombia aprovechando otra contra, esta vez luego de un centro de Lerma que sentenció Duvan Zapata, solito y solo dentro del área chica. 

Desconcertante actuación del equipo de Scaloni, muy preocupante de cara al futuro. En lo personal, me duele mucho ver jugar así a la Selección Argentina. Me hace estallar de rabia ver jugadores que no están a la altura de la gloriosa albiceleste. Me saca de las casillas ver tanta desorganización e improvisación. No obstante, esperemos que Scaloni haga variantes, revierta la horrenda imagen mostrada ayer  y nos devuelvan la alegría. El próximo miércoles tienen la oportunidad de recuperarse ante Paraguay.