FRANCIA ESPERA UN DÍA DEL TRABAJO AGITADO CON MARCHAS DE CHALECOS AMARILLOS Y ANARQUISTAS

FRANCIA ESPERA UN DÍA DEL TRABAJO AGITADO CON MARCHAS DE CHALECOS AMARILLOS Y ANARQUISTAS

Las movilizaciones afectarán París y otras grandes ciudades. Y habrá un fuerte dispositivo de seguridad.

Un 1°de mayo bajo la tensión, la violencia y el “estado insurreccional” espera a Francia. El gobierno, las fuerzas de seguridad y los parisinos se preparan para sufrir. Los Chalecos Amarillos y al menos 1500 Black Blocs anarquistas se apoderarán de la calle no para celebrar el Día del trabajo sino para desafiar a los autoridades. Habrá manifestaciones en Marsella, Toulouse, Caen y Bordeaux.

Se esperan entre 1500 y 2000 Black Blocs en las marchas en París, que intentarán recrear el caos del año pasado cuando incendiaron un restaurante McDonalds y una concesionaria de automóviles frente a la estación de Austerlitz, en la “Rive Gauche” de París, al lado del río Sena. Entre ellos, habrá extranjeros: alemanes, italianos, españoles anarquistas, que participarán en lo que describen como “un día de destrucción y revolución” en la capital francesa.

El gobierno va a desplegar 7400 miembros de las exhaustas fuerzas de seguridad en esta demostración número 25 de los Chalecos, solo en Paris.

Es la fiesta del trabajo, no de la violencia”. Fueron las palabras del ministro del Interior, Christophe Castaner, quien prometió “la mayor vigilancia”. Anunció la presencia “de 1000 a 2000 activistas radicales, posiblemente reforzados con individuos que vienen del extranjero, que podrían provocar desorden y violencia. A ellos se van a sumar los “ultra amarillos”, esos Chalecos Amarillos radicalizados.

El presidente Macron reitera a sus fuerzas de seguridad que distingan entre las bases que protestan y los ultras , ante las fuertes denuncias de violencia policial y la utilización de granadas mutilantes, que amenazan las manos, los pies y los ojos de los manifestantes y de la prensa, el jamón del sandwich en este conflicto. Al menos hay 22 personas que han quedado discapacitadas desde que se iniciaron las marchas a causa de estas armas.

Los sindicalistas y los ecologistas deberán decidir si marchan con los Chalecos o se diferencian en París y otras ciudades de Francia. La CGT, la Federación Sindical Unitaria ( FSU), Solidaires, la Unión de Estudiantes de Francia y la Unión Nacional de Liceístas ( UNL) desfilarán con la salida desde Montparnasse hasta la place de la Italie, como todos los años.

No se sabe si los Chalecos respetarán el trayecto o elegirán el suyo. La prefectura de la policía prohibió a los comercios, restaurantes y cafés permanecer abiertos a lo largo de la manifestación. Exigió que las sillas, mesas y plantas de las terrazas sean guardadas para que no sirvan de proyectiles, en una batalla campal contra las fuerzas de seguridad. También los alertó a proteger sus instalaciones con maderas contra saqueos y destrozos. Pero los Chalecos nunca declaran sus marchas ni respetan las trayectorias autorizadas.

Un grupo llamado “Manifestación Histórica por la democracia”, que es seguido por 13.000 personas en las redes, propone acompañar la manifestación autorizada. Llaman a sostener “una reforma de nuestras instituciones obsoletas”, a “la justicia fiscal” así como piden “menos corrupción, menos elegidos y menos privilegios”.

Nosotros no toleraremos ningún acto de violencia. El dispositivo será de una amplitud excepcional, móvil, reactivo, que nos permitirá ir hacia los grupos que cometen esas violencias y proceder al máximo de detenciones”, alertó el secretario de Estado del Interior, Laurent Núñez.

Un grupo de manifestantes quiere colocar el “affaire Benalla” a la cabeza de la marcha, en alusión al ex jefe de seguridad del presidente Macron, quien apaleó a una pareja de manifestantes el pasado 1° de mayo. Llama a los Chalecos a ponerse una máscara con la cara de Alexandre Benalla y liderar la manifestación de la CGT.

El ministerio del Interior estima que puede haber en todo el país 125.000 manifestantes y cuenta entre 25.000 a 30.000 sólo en París. En las redes sociales, los Chalecos Amarillos quieren hacer la mayor demostración de fuerza después de rechazar las medidas anunciadas por el presidente Emmanuel Macron para calmar la creciente crisis social y la división en el país.

El jefe de Estado exigió que la respuesta a los Black Blocs “sea extremadamente firme en caso de desorden, violencia o agresiones a las fuerzas del orden”.

Estos anarquistas, vestidos de negros, reunidos especialmente para la ocasión cuando durante la semana son profesores, empresarios, estudiantes, desempleados, ex bomberos o extranjeros, son la mayor preocupación del gobierno. Ellos temen una infiltración rusa para erosionar al gobierno y a las elecciones europeas. Se preguntan cómo financian los Chalecos Amarillos 25 semanas de movilización y quién paga por ella.

Ya se han establecido controles preventivos en las estaciones de tren, especialmente los que vienen de Alemania, Luxemburgo, España e Italia. Se abren valijas, mochilas y hay palpado de armas. Al menos hay 27 controles en todo París para impedir desde hoy que se agrupen en lugares sensibles. Un hombre fue detenido este martes en el barrio X de París armado con una navaja, una cachiporra y unos guantes con espinas de acero.

Después de cinco meses de manifestaciones , la prefectura de la Policía ha vuelto a prohibir las manifestaciones en los Campos Elíseos, la Asamblea Nacional, Notre Dame y el palacio presidencial del Eliseo, en cuyos alrededores se ha prohibido la circulación.

Es un test para el gobierno y las fuerzas de seguridad este Día del Trabajo de alto riesgo. La instrucción es evitar un muerto a toda costa. “El orden debe prevalecer”, según la decisión presidencial, y estará basado en este cambio de doctrina de las fuerzas de seguridad.