CONSERVÁ FRUTAS Y VERDURAS FRESCAS POR MÁS TIEMPO CON ESTOS 2 TRUCOS CASEROS

Dos métodos simples para evitar que frutas y verduras se oxiden en la heladera y duren más frescas sin usar conservantes.
Mantener las frutas y verduras frescas durante varios días en la heladera puede ser un desafío. La humedad, el contacto con el aire y las variaciones de temperatura suelen hacer que los alimentos se oxiden o se marchiten antes de lo esperado. Sin embargo, existen métodos simples y efectivos para conservarlos por más tiempo, sin usar conservantes ni productos químicos.
Con solo dos trucos caseros, se puede prolongar la vida útil de frutas y verduras, manteniendo su sabor, textura y nutrientes. Ambos métodos usan elementos comunes del hogar y no requieren más de un minuto de preparación.
1. El método del repasador húmedo: conservar la frescura natural
Este truco consiste en envolver las frutas o verduras en un repasador húmedo antes de guardarlas en la heladera.
El paño crea un microambiente con la humedad justa, evitando que el aire frío deshidrate los alimentos.
Es ideal para hojas verdes como lechuga, acelga o espinaca, pero también funciona con zanahorias, pepinos y morrones.
Consejos:
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El trapo debe estar limpio y apenas húmedo, sin chorrear.
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Guardar las verduras en el cajón inferior, donde la temperatura es más estable.
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Cambiar el repasador cada dos o tres días.
Con este método, los alimentos pueden conservar su frescura hasta un 50% más de tiempo que si se almacenan en bolsas plásticas.
2. El método del papel absorbente: controlar la humedad
El segundo truco consiste en colocar una hoja de papel de cocina absorbente en el fondo del recipiente o la bolsa donde se guardan las frutas y verduras.
El papel retiene el exceso de humedad que se genera dentro de la heladera, evitando que se formen gotas de agua que aceleran la descomposición.
Es especialmente útil para alimentos que liberan agua, como frutillas, uvas o tomates cherry.
Recomendaciones:
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Cambiar el papel cada dos días.
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No lavar las frutas ni verduras antes de guardarlas, ya que la humedad extra favorece el crecimiento de bacterias.
Según la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU.), la humedad es una de las principales causas de oxidación, por lo que este sencillo paso puede prolongar notablemente la vida útil de los alimentos.
Combinando ambos métodos —el repasador húmedo y el papel absorbente— se logra el equilibrio perfecto entre humedad y ventilación.
Con estos trucos simples y económicos se puede mantener la frescura natural por más días, reducir el desperdicio de alimentos y ahorrar dinero, disfrutando de frutas y verduras en óptimo estado durante toda la semana.
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