MUJERES TUCUMANAS: HOY DENISSE AGUIRRE, UNA NADADORA CON VOLUNTAD DE HIERRO

Desde Diario Prensa del Interior decidimos hacer un pequeño homenaje a las mujeres tucumanas que día a día desde su lugar con mucho esfuerzo y entrega nos representan.

Son aproximadamente las 9:15 de la mañana y Denisse entra en un café en San Miguel de Tucumán con una enorme sonrisa  y saluda. Apenas minutos después nos está contando su historia.

Muchos la conocimos después que el 16 de febrero de este año obtuvo el tercer puesto del podio en la Copa Ciudad de Mar del Plata, una de las competencias internacionales en aguas abiertas que es leyenda en la ciudad y a nivel internacional, de la que participaron 250 nadadores del país como así también de Estados Unidos, Chile, Uruguay, entre otros países.

Denisse tiene apenas 31 años, desde que tiene uso de razón le gustaron los deportes, entre ellos nadar. Actualmente cursa el Profesorado de Educación Física, sin duda le encanta porque transmite un entusiasmo cuando habla de deportes, de enseñar y aprender que contagia a todo aquel que la escucha.

Si tuviera que describrirla de alguna manera diría que es una persona que no se limita, que lucha por lo que quiere, que no ve obstáculos sino oportunidades y cada paso que da es un testimonio de eso. Con toda humildad, relata que ella había nadado en el mar sólo en una oportunidad pero ni siquiera en Mar del Plata. Por consiguiente, cuando fue a la competencia el único “entrenamiento” que tuvo en ese lugar fue el reconocimiento de campo. Llegar no fue fácil, según nos cuenta, poco tiempo antes de la competencia empezó a entrenar sola con la ayuda de su madre, Cristina Díaz, quien está presente en cada palabra, quien es su coach, su inspiración, su orgullo… la describe de un modo que cuesta no emocionarse. Buscó opciones de videos en internet, instructivos de nado en el mar, se nutrió de toda la información que pudo, siempre como ella dice: “sabiendo que podía hacerlo, que lo iba a lograr”. Porque más allá de todo lo que podían decirle ella tenía un sueño que quería cumplir y así se lanzó en busca de esa meta.

Mientras habla se puede percibir una fuerza de voluntad increíble, se expresa con tranquilidad, pero a la vez con la emoción de quien ama lo que hace. Narra que en alguna oportunidad a los 10 años, en el campo, donde dice con orgullo que creció junto a su familia, tuvo que nadar para cruzar un río que había aumentado su cauce. Un enorme desafío para su edad, pero ella lo logró porque sabía que podía. Como también sabía que podía en Mar del Plata. Y lo disfrutó, en medio de una competencia, con la presión que implica llegar, con el desgaste físico, ella se detuvo a mirar el imponente paisaje del mar juntándose con las nubes, momento que expresa que para ella será inolvidable.

No hay dudas que el futuro de Denisse es prometedor, no sólo por las condiciones físicas que tiene sino por la fuerza de voluntad, por su modo de hacer de cada impedimento una oportunidad para lograr algo, por su perseverancia, por no rendirse cuando las cosas no son como espera. Se propuso llegar y llegó. Creo que conocer la historia nos permite admirarla aún más. Ella quería terminar la carrera por todo lo que había significado estar ahí. No había entrenado durante el año en agua por sus múltiples ocupaciones, entre ellas un curso para ingresar a la Policía Penitenciaria, el cual le demandaba 12 horas de entrenamiento en tierra a diario, razón por la que no contaba con el tiempo  necesario para acudir a la pileta.  Como antes mencionaba, cuando comenzó a entrenar lo hizo de la mano de su madre, que siempre estuvo a su lado como ella dice, al igual que su papá, Guillermo Aguirre, quien también la motivó, la incentivó y también la ayudó en el plano económico ya que fue complicado viajar porque no tiene sponsors, sin embargo pudo hacerlo, buscó siempre el modo de seguir adelante, de poder. Sus padres junto a su hermano, a su sobrinita que la lleva desde que estaba en la panza de su mamá, acompañan a Denisse en cada competencia, son su motor, expresa con mucha dulzura y se le iluminan los ojos cuando completa la lista familiar nombrando a su hija Anouk Van Gelderen, que además la admira mucho, pues le encanta la natación y quiere seguir los pasos de su mami... Entre las personas que formaron parte de este enorme desafío ella no quiere olvidar a nadie y con una inmensa expresión de agradecimiento también menciona a Ulises Ferreira, un compañero de su carrera que le dio una mano gigante al colaborar con su entrenamiento de manera desinteresada lo cual fue para ella una gran ayuda. Así es como llegó a Mar del Plata, allí dio lo máximo y ganó un tercer puesto que es mucho más que eso, es el reconocimiento a su lucha diaria.

Este 28 de marzo, una vez más nos representa, en esta oportunidad en Las Termas de Río Hondo, Santiago del Estero, está entrenando para ese momento. Sin entrenar salió tercera entre 250 personas, en una competencia en aguas abiertas con olas incluidas, imaginensé lo que puede lograr esta vez…Desde Diario Prensa del Interior estaremos acompañándola en ese momento y ojalá haya una hinchada gigante de todos para esta tucumana que con las piedras con las que tropezó en su camino, en lugar de transformarse en una barrera, las recogió  y se hizo un castillo.

El mundo está lleno de superhéroes y de superheroínas que día a día hacen de él un lugar mejor. Hoy Denisse nos demostró que nunca hay que dejar de soñar y que siempre se puede…