DÍA NACIONAL DEL MATE: HISTORIA GUARANÍ Y LEGADO DE ANDRESITO GUACURARÍ

DÍA NACIONAL DEL MATE: HISTORIA GUARANÍ Y LEGADO DE ANDRESITO GUACURARÍ

Cada 30 de noviembre se celebra el Día Nacional del Mate, en homenaje a la tradición guaraní y al comandante Andresito Guacurarí, símbolo del Litoral argentino.

Como cada 30 de noviembre – Del ritual guaraní al símbolo argentino

El mate tiene su propio lugar en el calendario argentino. Cada 30 de noviembre se celebra el Día Nacional del Mate, una fecha que rinde homenaje a la infusión más consumida del país y que al mismo tiempo recuerda al comandante guaraní Andrés Guacurarí y Artigas, figura clave en la historia del Litoral. La efeméride fue establecida por la Ley 27.117, sancionada en 2014 y promulgada en 2015, en coincidencia con el natalicio de Andresito en 1778.

La jornada busca reconocer al mate como símbolo de identidad nacional, destacar su raíz guaraní y poner en valor el aporte de las provincias productoras de yerba mate, donde esta tradición forma parte de la vida cotidiana, cultural y económica.

Un ritual nacido en la cultura guaraní

Mucho antes de su incorporación masiva a la vida social rioplatense, el mate fue una práctica esencial en los pueblos guaraníes. La yerba, proveniente de la Ilex paraguariensis, era considerada un regalo de los dioses y utilizada con fines rituales, medicinales y alimenticios.

Con la llegada de los conquistadores españoles, el consumo se expandió por el antiguo Virreinato del Río de la Plata y dio origen a un importante circuito comercial. Con el paso del tiempo, aquella infusión indígena se transformó en una costumbre adoptada por criollos y mestizos, hasta consolidarse como un rasgo central de la identidad argentina. Ese reconocimiento también llegó a la legislación: en 2013 la Ley 26.871 declaró al mate como “Infusión Nacional”.

De la costumbre ancestral al símbolo nacional

Hoy el mate está presente en cerca del 90% de los hogares argentinos, según datos del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM). El consumo promedio supera los 6,4 kilos por habitante al año.

Sin embargo, el mate representa mucho más que una bebida: es un gesto de encuentro, diálogo y cercanía que atraviesa generaciones. Acompaña el trabajo, el estudio, reuniones familiares y momentos de descanso. Su significado social se ha mantenido a lo largo de siglos, acompañando también a milicias, soldados e incluso procesos políticos clave del país.

Quién fue Andresito Guacurarí y por qué se lo homenajea

El 30 de noviembre coincide con el nacimiento de Andrés Guacurarí y Artigas, caudillo guaraní y militar misionero. Si bien su lugar exacto de nacimiento es motivo de debate —entre Santo Tomé y San Borja—, se sabe que se formó en la reducción jesuítica de Santo Tomé, donde aprendió guaraní, castellano, portugués y latín.

Adoptado políticamente por José Gervasio Artigas, fue designado en 1815 como Comandante General de las Misiones, convirtiéndose en el único gobernador indígena reconocido en la historia argentina. Lideró tropas compuestas mayoritariamente por guaraníes, recuperó territorios ocupados y resistió invasiones lusobrasileñas.

Entre 1818 y 1819 encabezó la restitución del gobernador legítimo de Corrientes y llegó a ejercer el mando político-militar de la provincia, siendo también el único indígena en gobernarla.

Durante su administración impulsó una reforma agraria inédita, promovió el cultivo y la comercialización de yerba mate y favoreció la producción regional. Su gestión se inscribió en el ideario artiguista de igualdad, justicia social y participación indígena, aunque su figura permaneció largo tiempo relegada hasta ser reivindicada recientemente por estudios históricos modernos.

Federalismo, identidad guaraní y yerba mate

Para Andresito, la yerba mate fue un recurso estratégico clave. No sólo la impulsó como motor económico del Litoral, sino que integró su dimensión cultural guaraní al proyecto federal. Durante su gobierno se suprimieron símbolos coloniales y se reforzó la participación indígena en la vida pública.

 

Un símbolo que sigue evolucionando

El Día Nacional del Mate también rescata el valor de la cadena productiva yerbatera y la diversidad de consumos actuales. El INYM y distintas instituciones promueven actividades, difunden las propiedades nutricionales de la yerba y apoyan al sector productivo.

Sin dejar atrás al mate tradicional, crecieron las propuestas gourmet: yerbas saborizadas, blends con hierbas o frutas, bebidas energéticas a base de yerba mate, productos instantáneos e incluso su incorporación en helados, cócteles y gastronomía. A esto se suma su expansión internacional, en parte impulsada por deportistas y artistas argentinos que lo popularizaron en distintos países.

La fecha del 30 de noviembre sintetiza tradición, historia, identidad y memoria colectiva. Cada ronda de mate —en una casa, en una oficina, en una plaza— vuelve a conectar con ese legado guaraní y federal que atraviesa al país.