CONTADOR HALLADO MUERTO EN UN FREEZER: CÓMO FUE EL CRIMEN QUE CONMOCIONA A TUCUMÁN

Dos hermanos fueron detenidos e imputados por el homicidio del contador José Romano en Aguilares. Lo ocultaron en un freezer para encubrir el crimen.

Contador hallado muerto en un freezer: revelaron cómo ocurrió el crimen

Dos hermanos, de 24 y 28 años, fueron imputados por el homicidio del contador José Antonio Romano, cuyo cuerpo fue hallado dentro de un freezer en su vivienda de Aguilares, al sur de Tucumán. La Fiscalía sostiene que hubo una pelea previa, una puñalada fatal y un intento de encubrimiento para asegurar la impunidad.

Tras entregarse en la comisaría de Concepción, los hermanos Marcos Antonio y Héctor Ariel Videz quedaron detenidos e imputados por homicidio agravado, según dispuso la auxiliar de fiscal Gabriela Ghilardi, en representación del fiscal Miguel Varela, durante la audiencia realizada en el Centro Judicial Concepción.

Cómo ocurrió el crimen

De acuerdo con la acusación, en la madrugada del sábado 25 de octubre, Romano —empleado del área de Rentas provincial— llegó a su domicilio en la esquina de avenida General Savio y Virgen del Carmen, junto a Marcos Videz.

Dentro del dormitorio, ambos comenzaron una discusión que derivó en una pelea violenta: Videz le habría propinado golpes de puño y una puñalada en el cuello con un objeto punzocortante.

El informe forense determinó que la causa de muerte fue asfixia por lesión de tráquea, producto de una herida de arma blanca en la región cervical lateral derecha.

Horas después, alrededor de las 3.15, Marcos Videz abandonó la vivienda en la camioneta de la víctima y fue a buscar a su hermano Héctor. Ambos regresaron y, según la investigación, maniataron el cuerpo con cables de aspiradora y ventilador, para ocultarlo en un freezer, intentando así borrar rastros y garantizar la impunidad.

Huida y hallazgo del cuerpo

Los acusados escaparon en la camioneta de Romano, que fue hallada abandonada en calle Jujuy, entre Neuquén y Catamarca, con las patentes retiradas y dejadas en su interior.

El macabro hallazgo del cuerpo ocurrió el domingo siguiente, cuando allegados y efectivos policiales ingresaron a la vivienda ante la ausencia del contador, de 52 años.

Las cámaras de seguridad de la zona fueron claves para reconstruir los movimientos previos y posteriores al crimen, junto a otras pruebas periciales reunidas por la Unidad Fiscal Especializada en Homicidios.

Prisión preventiva

La Fiscalía solicitó prisión preventiva por cuatro meses para ambos imputados, fundamentando riesgo de fuga y entorpecimiento de la investigación, medida que fue concedida por el juez interviniente.

Durante la audiencia, el Ministerio Público presentó registros fílmicos, pericias forenses y testimonios que consolidan la hipótesis del homicidio agravado. Mientras tanto, los investigadores avanzan en determinar los motivos del conflicto y la relación entre víctima y agresores.