PREOCUPANTE SEQUÍA EN LA CUENCA DE LAS CATARATAS DEL IGUAZÚ, CASI SIN AGUA Y PIEDRAS AL DESCUBIERTO
La extrema bajante que afecta a los ríos Paraná, Iguazú y Paraguay y en menor medida al Uruguay, cambió los paisajes y una de las maravillas del mundo, se convirtió en una desolada imagen.
Bañada por tres de los ríos más caudalosos del continente, el Paraná, el Uruguay y el Iguazú y decenas de arroyos, parece irónico que en algunas zonas de Misiones haya faltante de agua. Pero el tema excede los límites de la región, desde la naciente del Paraná en Brasil hasta el Río de la Plata en Buenos Aires, vive una sequía histórica y en consecuencia los caudales de los ríos están en descenso.
La maravilla natural del mundo y también de la Argentina, las flamantes Cataratas del Iguazú, dejan ver sus impresionantes muros de rocas tras la histórica bajante que se registra por estos días.
El pasado 13 de junio se registró el menor caudal del río con 308 metros cúbicos por segundo, mientras que en la jornada del viernes 18 se registró una crecida y se notificaron 438 metros cúbicos por segundo.
CRISIS HÍDRICA
Las Cataratas del Iguazú, maravilla natural, siempre ofrecen paisajes diferentes. Se pueden apreciar crecidas extraordinarias, como impresionantes muros de piedra cuando el caudal del río Iguazú se ve reducido por una sequía como la que se vive actualmente. En esta oportunidad, los visitantes pueden contemplar la falla geológica.
La crisis hídrica por la persistente sequía está causando graves problemas en el suministro de agua potable en Iguazú y también se refleja en su principal atractivo turístico, que muestra una imagen poco habitual.
Las Cataratas del Iguazú sin agua son el rostro de la nueva pandemia en el norte: la sequía, publicó ReportaDigital. Imágenes de las Cataratas con el caudal más bajo del año, registradas el día 18 de junio, muestra los efectos de la prolongada sequía de más de un año.
EN BRASIL
En tanto, en Brasil consideran que las imágenes de las Cataratas del Iguazú con el caudal más bajo del año, resumen la severa sequía que enfrenta el estado brasileño de Paraná desde hace más de un año. Además de los cambios en el escenario natural y los efectos en la vida cotidiana de la población, la sequía está provocando cuantiosas pérdidas económicas al Estado que pueden extenderse hasta fines de 2021.
Las regiones más afectadas por la falta de lluvia se encuentran actualmente en situación de emergencia hídrica, con restricciones de suministro en algunas ciudades, indicó el diario Folha de Brasil.
Además del paisaje seco, que comprometen el punto turístico más importante de Paraná, hay otros sectores perjudicados.
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