EN SU PRIMERA MISA DE NAVIDAD, EL PAPA LEÓN XIV PIDIÓ PROTEGER A LAS POBLACIONES INDEFENSAS

EN SU PRIMERA MISA DE NAVIDAD, EL PAPA LEÓN XIV PIDIÓ PROTEGER A LAS POBLACIONES INDEFENSAS

En su primera misa de Navidad en San Pedro, el papa León XIV centró su mensaje en el sufrimiento causado por las guerras y llamó a proteger a las poblaciones indefensas.

 

Un mensaje de Navidad centrado en el dolor del mundo

El papa León XIV celebró su primera misa de Navidad en la basílica de San Pedro, una ceremonia histórica que volvió a realizarse en este templo luego de más de 30 años, y centró su mensaje en el sufrimiento provocado por los conflictos armados, los desplazamientos forzados y la exclusión social en distintas regiones del mundo.

Durante la homilía, el pontífice hizo un llamado a proteger a las poblaciones indefensas y a no permanecer indiferentes ante el dolor de quienes padecen las consecuencias de la guerra, la pobreza y el desarraigo.

 

Gaza, los refugiados y los sin techo, en el centro del mensaje

León XIV recordó de manera explícita el sufrimiento de los habitantes de Gaza, así como el de los desplazados y refugiados en todos los continentes, y el de las miles de personas sin hogar que viven en condiciones precarias en las grandes ciudades.

Jesús quiere que toquemos la miseria humana, que toquemos la carne sufriente de los demás”, expresó el pontífice, y se preguntó:
“¿Y cómo no pensar en las tiendas de Gaza, expuestas desde hace semanas a las lluvias, al viento y al frío, y en las de tantos otros desplazados y refugiados en cada continente, o en los refugios improvisados de miles de personas sin hogar en nuestras ciudades?”

En ese marco, afirmó que “frágil es la carne de las poblaciones indefensas, probadas por tantas guerras en curso o terminadas, dejando escombros y heridas abiertas”.

Un llamado a escuchar el dolor ajeno

El papa también puso el foco en los jóvenes que participan de los conflictos armados:
Frágiles son las mentes y las vidas de los jóvenes obligados a tomar las armas que, estando en el frente, advierten la insensatez de lo que se les pide y la mentira que impregna los rimbombantes discursos de quien los manda a morir”, afirmó Robert Prevost, nombre secular del pontífice.

En uno de los pasajes más profundos de la homilía, León XIV sostuvo que la paz comienza cuando el sufrimiento del otro interpela de manera directa:
Sólo cuando la fragilidad de los demás nos atraviesa el corazón, cuando el dolor ajeno hace añicos nuestras sólidas certezas, entonces ya comienza la paz”.

 

La paz como compromiso y misión de la Iglesia

“La paz de Dios nace de un sollozo acogido, de un llanto escuchado; nace entre ruinas que claman una nueva solidaridad”, expresó el Papa, al tiempo que señaló que la Navidad vuelve a impulsar a una Iglesia misionera, comprometida con los caminos que marca la Palabra de Dios.

“No estamos al servicio de una palabra prepotente, esas ya resuenan por todas partes, sino de una presencia que suscita el bien, que conoce su eficacia y que no se atribuye el monopolio”, afirmó, en referencia al rol pastoral de la Iglesia en el contexto global actual.

Y concluyó:
Habrá paz cuando nuestros monólogos se interrumpan y, fecundados por la escucha, caigamos de rodillas ante la carne desnuda de los demás”.

Bendición “Urbi et Orbi” y llamado al diálogo

Durante la tradicional bendición “Urbi et Orbi”, León XIV pidió de manera especial por Ucrania y exhortó a ambas partes del conflicto a buscar una salida pacífica.

“Oremos de manera especial por el atribulado pueblo ucraniano, para que cese el estruendo de las armas y las partes implicadas, con el apoyo de la comunidad internacional, encuentren el valor para dialogar de manera sincera, directa y respetuosa”, expresó desde el Vaticano.

Actualmente, Moscú y Kiev mantienen negociaciones separadas en torno a un plan impulsado por Estados Unidos para poner fin a casi cuatro años de guerra, en un escenario internacional marcado por la incertidumbre y la tensión.