TIROTEO EN UNA UNIVERSIDAD DE CAROLINA DEL NORTE: DOS MUERTOS Y CUATRO HERIDOS

Ocurrió en la ciudad de Charlotte. Dos de los heridos estarían en grave estado. El atacante fue detenido.

Al menos dos personas murieron y otras cuatro resultaron heridas -dos de ellas de gravedad- en un tiroteo ocurrido este martes en el campus de la Universidad de Carolina del Norte (UNC) en Charlotte (Estados Unidos), según informaron las autoridades.

La Policía la ciudad indicó en redes sociales de la detención de un sospechoso y dijo que probablemente había actuado en solitario. "La escena es segura. Una persona bajo custodia. No hay razón para creer que nadie más está implicado", precisó.

Poco antes de las 18.00 hora local (22.00 GMT), la UNC emitió una orden de confinamiento por disparos en el campus. "Corran. Escóndanse. Luchen. Protéjanse de inmediato", comunicó la UNC a su comunidad universitaria a través de Twitter.

Poco después, la Policía de Charlotte informó del envío de una unidad de elite SWAT al lugar en el que se habían reportado los tiros.

El Servicio de Emergencias Médicas del condado de Mecklenburg, cuya capital es Charlotte, dijo que habían hallado a dos personas muertas en el lugar de los hechos y a otras cuatro con heridas, dos de ellas de gravedad.

Los tiroteos en centros educativos de Estados Unidos se han convertido en algo común en los últimos años. El año pasado ocurrieron dos de los peores de su historia, con 17 muertos en un instituto de Parkland (Florida) el 14 de febrero y tres meses después, el 10 de mayo, diez muertos en otro instituto esta vez en Santa Fe (Texas).

Sin embargo, el más grave de este tipo de tiroteos en centros educativos tuvo lugar en abril de 2007 en un campus de la universidad Virginia Tech en Blacksburg (Virginia), cuando el estudiante de 23 años Seung-Hui Cho asesinó a 32 personas antes de suicidarse.

Hasta los tiroteos en una discoteca de Orlando (Florida) con 49 muertos en 2016 y en un concierto en Las Vegas (Nevada) con 58 muertos en 2017, el de Virginia Tech era el tiroteo más mortífero de la historia de Estados Unidos.