UNA RICA HEREDERA INVOLUCRADA EN EL ESCÁNDALO DE LA SECTA NXIVM

UNA RICA HEREDERA INVOLUCRADA EN EL ESCÁNDALO DE LA SECTA NXIVM

Es Clare Bronfman, del gigante de bebidas Seagram. Admitió que colaboraba con el gurú Keith Raniere, acusado de liderar un sombrío clan donde esclavizaban mujeres.

Clare Bronfman, la multimillonaria heredera del gigante canadiense de bebidas alcohólicas Seagram, una de las más famosas es el whisky, admitió estar involucrada en el escándalo de la secta Nxivm, donde decenas de mujeres se convirtieron en esclavas sexuales del controvertido gurú Keith Raniere.

Así se suma a la actriz Allison Mack, de la serie de televisión “Smallville”, quien también confesó ante la justicia haber formado parte de este escabroso y oscuro grupo al que se acusa de blanquear dinero, tráfico sexual, extorsión y posesión de pornografía infantil.

Clare Bronfman, junto a su hermana Sara, está acusada de aportar más de 100 millones de dólares de la fortuna familiar a la secta para financiar demandas de Raniere contra sus enemigos. También se cree que ayudó a convencer a mujeres para sumarse al grupo.

 

Cómo funcionaba la secta

En 1998, Keith Raniere, que se presentaba como gurú de la motivación personal, creó la organización Programas Ejecutivos de Éxito, a través de la cual impartía talleres de cinco días por los que cobraba hasta 5.000 dólares.

Años más tarde fundó Nxivm, la secta que estableció al norte de la ciudad de Nueva York y donde obligaba a los asistentes a tomar clases adicionales a mayor precio y a traer a otras personas para "ascender" dentro de los rangos internos de la organización y así obtener privilegios.

La historia tomó un giro aún más oscuro cuando en el año 2015, Raniere formó una sociedad secreta dentro de Nxivm llamada "DOS", "para empoderar a las mujeres y erradicar las debilidades del programa de estudios".

Estas mujeres se convertían finalmente en sus esclavas sexuales, siendo forzadas a realizar tareas domésticas y marcadas a fuego como ganado en sus zonas pélvicas con las iniciales del líder, ceremonia que era grabada y en la que todas tenían que estar totalmente desnudas.

Una vez cumplido este rito, las mujeres tenían que estar disponibles para Raniere día y noche.

Para evitar fugas, las víctimas eran extorsionadas con información comprometedora sobre amigos y familiares, fotografías de desnudos y derechos sobre las pertenencias que ellas mismas aportaban.

Por eso muchas tenían temor de dejar el lugar o no obedecer, según lo que trascendió en los tribunales.

En abril de 2018, Raniere, de 57 años, fue detenido tras ser acusado formalmente en un tribunal de Nueva York de tráfico sexual, de conspirar para tráfico sexual y para obligar a trabajo forzoso, por los que enfrenta un mínimo de quince años de prisión y un máximo de cadena perpetua.

El caso impactó fuerte en la sociedad estadounidense por las personas famosas involucradas. La cadena HBO ya anunció que producirá una serie documental sobre el escándalo.