¿QUIÉN ES LUCIANO ABALO?

Luciano hace cine porque realmente hay cosas que le gusta contar desde un punto de vista que es solamente suyo, que viene desde la imaginación surgida por vivir cosas en la calle, de tener experiencias cercanas a la muerte, y experiencias paranormales. Ha vivido muchas cosas en estos 31 años de vida que tiene, y también tiene ganas de mostrárselas a alguien en un lenguaje audiovisual, y al mismo tiempo de forma poética. Esta pasión nació en él por ver mucho cine, muchos directores e ir descubriendo cómo ellos utilizaban los recursos que ofrece el Cine para contar una historia. Eso lo inspiró para empezar a estudiar y posteriormente hacer su primer cortometraje.

Lo que más le gusta del Cine es la fotografía, cómo uno cuenta una historia a través del encuadre que elige en la cámara, el mensaje que envía según el tiempo que mantiene abierto el obturador, cómo sigue la acción de los personajes con el movimiento de cámara, los colores que puede captar, esa gama tan amplia de colores y momentos cree que es lo que más le gusta del Cine. Piensa que el Departamento de fotografía es esencial, y es muy importante incluir también al Departamento de sonido, que permite crear el colchón de sonido para una película, poder darle un tempo con él, más allá de la música que ya es el leitmotiv, elementos muy importantes a la hora de crear un clima, una atmósfera.  Se crea tanto en lo visual como en lo sonoro, para transmitirle a la persona espectadora, la sensación que el director ha querido lograr. Por eso, Luciano siempre trabajó en las áreas relacionadas con la fotografía y la dirección.

Tiene varios directores favoritos, actores no tantos, pero bueno, le gusta muchísimo Andrei Tarkovsky; considera que es uno de los mejores cineastas que existieron. Ha visto toda su filmografía, la cual no es muy extensa porque sólo consta de 7 películas, pero considera a cada una como una bomba, dice que cualquiera que veas te vuela la cabeza, porque son muy profundas, muy poéticas por el uso de la imagen, los movimientos de cámara, el sonido, la filosofía que abunda en ellas, tan profundas, melancólicas, al tiempo que dejan un mensaje que te toca el corazón, sí o sí. También le gusta mucho su narrativa, cómo construye una historia a partir de la fotografía.  Otro director que le gusta es Paul Verhoeven, por cómo maneja la ciencia ficción. Frank Darabont como director ha hecho cosas muy buenas dentro del género Terror, es muy buen escritor también, y tiene un muy buen manejo de la cámara y de sus actores. Martin Scorsese es muy muy groso dentro del género Suspenso, con sus películas sobre la mafia; construye muy bien la imagen. Y no se olvida del gran Stanley Kubrick y su uso magistral de la cámara, con sus movimientos y siempre el plano centrado para remarcar la historia. Podría estar hablando toda la noche de directores, pero hay que contar una parte, así que bueno, actores favoritos no tiene, pero uno de los más grosos que ha visto, que realmente sobresale entre muchos, es Johnny Depp. Morgan Freeman es muy bueno. Robert De Niro es sinceramente uno de los mejores. Cree que en realidad los actores sí cumplen un papel fundamental en las películas, pero si no tienen un buen director al lado, pueden llegar a perderse. Ha visto películas de Johnny Depp donde no explotaron del todo su potencial, y eso es porque el director no se sabe manejar, o está muy apurado. Y agrega riendo que, aunque suene muy gracioso, le gusta muchísimo Arnold Schwarzenegger, por cómo trabaja, es un groso, sí, obviamente que es un capo en el género Acción que es lo que sabe hacer él, ¿no? Pero es muy buen actor, en ese campo.  

Se siente muy cómodo a la hora de hacer suspenso, terror psicológico y drama, como director, y como espectador también elige mucho el terror, el suspenso, la ciencia ficción. No ha hecho nunca un corto de ciencia ficción, tendría que probarlo, pero es algo que le apasiona mucho ver, y acción también, drama no tanto. Ha visto muchas películas de la generación de los 80’s y 90’s, donde están Schwarzenegger, Stallone, Van Damme, Jet Li, Jackie Chan, y toda esa sarta de actores que la rompían a patadas y piñas en el cine y que era muy interesante verlos y disfrutar de eso también.  

Tiene un próximo proyecto, pero junto a su equipo todavía tienen que filmar un teaser (formato de publicidad que funciona como anticipo de cualquier tipo de campaña, ofreciendo sólo información fragmentaria) y conseguir el financiamiento; es una película que entraría en el género de Comedia dramática, y está totalmente influenciada por la obra de Tarkovski, puntualmente en cuanto a la técnica. 

Su obra consta de cinco cortometrajes y dos documentales, realizados mientras estaba en la universidad; un total de siete películas, ningún largometraje todavía. Tiene escritos muchos guiones, para cortos y largometrajes, algunos sin terminar, pero que esperan por él para ser continuados. Esa sería hasta ahora su obra. Ha participado en tres oportunidades del Festival Nacional de Cortometrajes “La hora mágica”, de Villa Mercedes, San Luis, y tanto en la primera como en la segunda edición, ganó el segundo premio, la Mención especial del jurado en competencia local, en 2013 con el cortometraje La despedida y en 2014 con el cortometraje Los amigos. Fue una experiencia muy buena, y hubo una camaradería muy grande entre todos los realizadores. Siempre después de cada encuentro, de cada proyección en los festivales, se han ido todos juntos a comer un asado, a tomar unas cervezas, y a seguir charlando de cine. Hubo unas aventuras muy locas, recuerda una anécdota: después de una proyección, fueron a comer un asado, luego a tomar algo y jugar al pool, y ya de regreso al hotel, vieron que había una niebla impresionante en Villa Mercedes, entonces se les ocurrió sacar unas fotos. Era una niebla espesísima, muy extraña, y hacía un frío increíble, pero eso no los detuvo, se abrigaron bien y fueron a sacar las fotos. Sacaron con teléfonos y hasta con una cámara analógica. Un amigo suyo aún conserva esas fotos, recuerdos de algo muy lindo.