IRÁN SUSPENDE PARTE DEL ACUERDO NUCLEAR Y ESTADOS UNIDOS LE IMPONE MÁS SANCIONES

IRÁN SUSPENDE PARTE DEL ACUERDO NUCLEAR Y ESTADOS UNIDOS LE IMPONE MÁS SANCIONES

Lo anunció el presidente iraní y dio 60 días para hallar una solución. Donald Trump reaccionó con dureza.

Irán anunció este miércoles que dejará de aplicar “algunos” de sus “compromisos” del acuerdo internacional sobre su programa nuclear, de 2015, en respuesta a la decisión unilateral de Estados Unidos de retirarse de ese pacto hace un año y restablecer sanciones. Teherán amenazó además con renunciar a otros compromisos si los restantes signatarios no encuentran una solución en un plazo de 60 días para aliviar los efectos de las sanciones estadounidenses contra la República Islámica, en particular en los sectores petrolero y bancario.

Poco después, el presidente estadounidense, Donald Trump, anunció sanciones contra los sectores minero y del acero iraní, pero dijo que espera reunirse “algún día” con los líderes iraníes para negociar.

Hoy voy a firmar una orden ejecutiva para imponer sanciones contra el hierro, el acero, el aluminio y el cobre de Irán, que son las fuentes más grandes de ingresos del régimen, fuera del petróleo”, anunció el mandatario en un comunicado difundido por la Casa Blanca. Según Estados Unidos, este sector suma un 10% de las exportaciones de Irán. “Teherán puede esperar más acciones salvo que cambie en lo fundamental su conducta”, dijo Trump en el comunicado.

Ambos anuncios tienen lugar en un clima de tensiones exacerbadas entre Irán y Estados Unidos, que indicó el martes que enviaba bombarderos B-52 al golfo. Desde ahora, “la República Islámica de Irán no se considera comprometida a respetar las restricciones concernientes a las reservas de agua pesada y uranio enriquecido”, afirmó el Consejo Superior de Seguridad Nacional en un comunicado.

El presidente Hassan Rohani señaló que estas medidas son conformes al acuerdo de Viena que permiten a las partes suspender parcial o totalmente algunos de sus compromisos en caso de incumplimiento de otra de las partes.

El acuerdo “necesitaba sufrir una operación quirúrgica luego de que un año de sedantes no produjese ningún efecto”, declaró por su parte Rohani en una metáfora médica. “Esta operación quirúrgica está destinada a salvarlo, no a destruirlo”, insistió.

El anuncio de los iraníes es “intencionadamente ambiguo”, dijo el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo. El emisario estadounidense para Irán, Brian Hook, advirtió por su lado que su país “nunca será rehén del chantaje nuclear del régimen iraní” y subrayó que los anuncios de Teherán sobre un posible incremento de su plan nuclear es “contrario a las normas internacionales”.

El presidente ruso Vladimir Putin denunció este miércoles la “presión irracional” que sufre Irán a raíz de “decisiones irreflexivas y arbitrarias”, que provocan “medidas enojosas”, declaró a la prensa el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov. Y China aseguró que “mantener y aplicar el acuerdo es responsabilidad de todas las partes”, según el portavoz de la diplomacia, Geng Shuang.

Israel, feroz enemigo de Teherán y del acuerdo, afirmó que no permitirá a Irán fabricar armas nucleares. Alemania, en tanto, llamó a Teherán a respetar la “totalidad” del acuerdo nuclear con las potencias y para el Reino Unido, la decisión de Irán es un “paso inoportuno”.

Convalidado por una resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, el acuerdo permitió a Irán obtener un levantamiento parcial de las sanciones internacionales a las que estaba sometido.

A cambio, Teherán aceptó limitar de manera drástica su programa nuclear y se comprometió a no buscar dotarse de armas nucleares. Pero al juzgar que el acuerdo no ofrecía garantías suficientes, el presidente Trump retiró a su país hace exactamente un año y restableció sanciones contra Teherán. Esto afectó duramente a la economía de la República Islámica y a sus relaciones comerciales con los otros países involucrados.

Los europeos, China y Rusia reiteraron su compromiso, pero se mostraron incapaces de respetar su promesa de permitir que Irán se beneficie de las ventajas económicas del acuerdo. La Unión Europea intentó crear un mecanismo para permitir a Irán que continúe comerciando con sus empresas eludiendo las sanciones estadounidenses.

Teherán advirtió que si al cabo de 60 días los otros países no encuentran una solución, dejará de respetar las restricciones sobre el grado de enriquecimiento de uranio o las medidas relativas a la modernización del reactor de agua pesada de Arak, en el centro de Irán.